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miércoles, 10 de abril de 2013

Lecturas surtidas
Salarios variables, arte y Margaret Thatcher

Hoy les propongo un surtido de lecturas: un pequeño viaje desde las tendencias que observamos hoy hasta el pasado reciente donde muchas de ellas se originaron.

Los propietarios de una empresa estadounidense establecen un sistema salarial híper flexible a sus empleados.. y dicen tener éxito. Mientras tanto, en otro lugar del planeta, una consultora propone cursos de arte para mejorar la productividad de la empresa: Van Gogh se revuelve en su tumba. Y, hablando de funerales, un (anti)obituario de Margaret Thatcher.

 

Porqué les pagamos comisiones a todos nuestros empleados


Esta nota, Why We Pay All Our Employees a Commission, fue publicada por el blog de Harvard Business Review en marzo de 2013 [1]. Los autores describen su éxito al gestionar su empresa, Fishbowl, de 100 empleados, con un esquema de comisiones para todos los empleados. Todos, no sólo los de ventas, quienes son los que usualmente están bajo esta modalidad. Cada "colaborador" recibe una paga fija menor al promedio del mercado, tipicamente un 20% menos. La paga variable está asociada a las ganacias de la empresa. Para los dueños (y autores de la nota) esto permite una máxima motivación de los empleados y una máxima estabilidad financiera de la compañía, dado que las costos suben o bajan con los ingresos.

¿Qué pienso yo de esto? Básicamente que ser empleado no es lo mismo que ser dueño. Hay una responsabilidad intransferible del dueño. Hacer variable el salario significa transferir parte del riesgo empresario a los empleados. Es lo que Robert Castel, sociólogo francés, llama la conversión de un sistema asalariado a uno de precariado [2]. En estas épocas de máxima flexibilidad laboral es necesario resaltar cada vez que sea necesario que no hay que tolerar la precarización del trabajo.

Ars longa, vita brevis


Recibí un mail de una consultora argentina que no voy a mencionar, pero que pueden identificar rápidamente por los datos que daré. En esta comunicación ofrecen un curso llamado "El arte como herramienta de motivación, retención y formación del capital humano". Este taller se propone, entre otros objetivos:
  • Indagar cómo el arte en la organización puede incrementar la creatividad.
  • Descubrir el propio potencial y utilizarlo en pos de la organización.
  • Motivar al personal logrando bajar el índice de ausentismo y mejorar el desempeño.
El arte cura, expande la visión, enriquece la vida personal... pero, ¿el arte mejora la productividad empresaria? ¡Me niego enfáticamente a instrumentalizar el arte de esta manera! Ya bastante tenemos con los talleres de creatividad para mandos medios, como para tener que soportar una clase sobre cómo "El período azul de Picasso puede ayudarlo a incrementar su cuota de ventas trimestral".


La Dama de Hierro


Y, como todos saben, murió Margaret Thatcher, la Dama de Hierro [3]. Sorprende sobremanera (o tal vez no) que en estos años de crisis del neoliberalismo su figura sea reivindicada por los actuales líderes globales. Se sabe: sus políticas, junto con las del entonces presidente estadounidense Ronald Reagan, fueron esenciales para instrumentar el neoliberalismo global, que ha producido -entre otras cosas- precarizaciones crecientes en el modelo laboral, la erosión del estado benefactor y el gran descalabro financiero mundial que comenzó en 2008. Se conoce el rechazo de Ms. Thatcher a los sindicatos, a cualquier regulación de los mercados financieros, a cualquier asistencia social. Entonces: a poner a funcionar la memoria histórica y a repudiar cualquier intento de canonización secular de la Dama de Hierro.


Referencias


[1] David K. Williams and Mary Michelle Scott. Why We Pay All Our Employees a Commission, en HBR Blog Network, http://blogs.hbr.org/cs/2013/03/why_we_pay_all_our_employees_a.html

[2]  Castel, Robert. El ascenso de las incertidumbres.Trabajo, protecciones y estatuto del individuo, Fondo de Cultura Económica, Buenos Aires, 2010.

[3] http://www.pagina12.com.ar/diario/ultimas/20-217546-2013-04-08.html


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2 comentarios:

  1. lo interesante es indagar cómo lo ven los empleados esto que observás. cuál es el speech (no digo 'discurso'porque así suena más marketinero) que toma tanta fuerza como para convencerlos?

    se me ocurren otras formas de organización cooperativa donde también hay un planteo similar, con la diferencia de que los asociados son dueños... sin embargo algunas implementaciones de este tipo de organizaciónes -aunque en los mejores casos brinden mecanismos de participación- adquieren un funcionamiento similar a la precarización... ya sea porque en verdad son estructuras legales con el objetivo de encubrir sociedades anónimas, o porque se rigen por una doble moral, donde en el speech cooperativo -a través de la identificación con el ideal- induce el sobre_esfuerzo, pero los fines lucrativos y de ganancias empuñan ahorros en los sueldos.

    cuál es el mecanismo común que opera en estos casos?

    (recuerdo el documental sobre la televisión del post anterior y los elefantes de circo que están atados con una soga leve)


    ido por las ramas,
    Croissant

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    Respuestas
    1. No hay que perder de vista, amigo Croissant, que estas movidas (¿"modas"?) vienen todas de USA, donde se exalta el individualismo y el espíritu emprendedor. Entonces, no les resulta importante -digo yo- quién detenta los medios de producción: hoy los tiene Mr. A, mañana yo tendré mi start-up. Sería MUY interesante hacer un trabajo de campo con esa gente (empleados y empleadores).

      Mientras tanto, 12.000 km al sur, no veo factible este esquema hiper flexible en Argentina. Ojo: no hablo de trabajos precarizados y en negro, aceptados sólo porque no hay opción; sino al esquema de aceptación gozosa y voluntaria de más arriba. Las trayectorias históricas y las filosofías son bien diferentes. Otra cosa son las cooperativas, de gran tradición y empuje. Como botón de muestra, la ex Zenon.

      Da para seguir largo y tendido sobre estos tópicos.

      Baje de la rama, que se viene la noche.

      Eliminar

Los comentarios son bienvenidos. Prefiero los seudónimos a los anónimos...

 

El Origen de la Crítica

La formulación de una crítica supone previamente la vivencia de una experiencia desagradable que suscita la queja, ya sea ésta padecida personalmente por el crítico o el resultado de una conmoción por la suerte de otro. Es lo que aquí denominamos la fuente de la indignación. Sin este primer movimiento emotivo, casi sentimental, ninguna crítica puede emprender vuelo. Por otro lado, el espectáculo del sufrimiento no conduce automáticamente a una crítica articulada, ya que necesita un apoyo teórico y de una retórica argumentativa para dar voz y traducir el sufrimiento individual en términos que hagan referencia al bien común.

Boltanski, Luc y Chiapello, Eve. El nuevo espíritu del capitalismo (Madrid, Ediciones Akal, 2010, página 83).

Las Políticas de Management

En la actualidad las políticas de management subjetivan buscando una identidad entre trabajo y vida, entre objetivos personales y objetivos del capital y haciendo que los trabajadores hagan, por sí mismos, algo que al capital ya no le resulta tan sencillo realizar: controlar el uso eficiente de la fuerza de trabajo en función de sus propios objetivos.

Zangaro, Marcela. Subjetividad y trabajo (Herramienta Ediciones, Buenos Aires, 2011, pag. 182).

Enfrentamiento interno

Cuanto más se asciende en la organización más se funde uno con ella, puesto que más que estar dividido entre las exigencias del negocio y los criterios del personal, unas y otros entran en sinergia reforzándose mutuamente [...] El enfrentamiento entre capital y trabajo, que siempre había tenido como campo natural la empresa, pasa a producirse en el interior del individuo, que se debate entre su tendencia a trabajar menos para protegerse y escapar de las exigencias de la empresa, y su inclinación a trabajar cada día más para aumentar sus beneficios y mejorar siempre los resultados.

Auber, Nicole y De Gaulejac, Vincent. El coste de la excelencia. (Paidós Ibérica, Barcelona, 1993, pág. 38).